La vida en Canadá, de Frederic Rosset
Sara (Alison Chassagne) es una joven francesa que está en pareja con otra mujer. Aquella tiene una hija que ambas comparten mientras conviven a diario. Un fin de semana su madre las invita a celebrar su cumpleaños en compañía de su hermano (Sebastien Chassagne) y su padre (Phillipe Rebbot). Pero las casualidades del destino provocaron previamente una pelea entre la joven y su pareja por lo cual decide asistir al encuentro sólo acompañada de la pequeña hija de aquella.
Durante el camino, la pequeña Hilarion (Sarah Zapata) le pregunta por qué su madre no asistirá a la fiesta y Sara intenta explicarle que decidió quedarse en la casa preparando el equipaje para el viaje a Canadá que harán las tres en unos días. Al llegar a la casa materna, el encuentro se torna insoportable dado que su madre, su hermano y su padre deciden sacar varios trapos sucios del pasado y la joven que, en apariencias esconde un secreto mortificador, se verá superada por la situación y se preguntará si va a pasar todo un fin de semana imbuída de ese clima negativo o si regresará con la niña y hacerse cargo de la situación incómoda en la que dejó a su pareja antes de emprender el viaje.
Con ese nudo argumental el director Frederic Rosett se entromete en la complejidad de las relaciones humanas y expone la fragilidad a la que están sometidos la mayoría de los seres humanos. Cada uno de los personajes porta sobre sus espaldas un rosario de dolores y letanías que quedan claros en el modo de relacionarse y de sostener un vínculo aunque sólo se trate de una convivencia de pocos días.
El cortometraje tiene una gran profundidad filosófica y expone los nuevos modos de relacionarse de quienes integran las llamadas sociedades posmodernas. La niña, por ejemplo, no sólo debió sufrir la separación de sus padres, sino que, además, debió aceptar la nueva condición sexual de su madre y la obligación de adaptarse a convivir con su nueva pareja, quien indefectiblemente terminó transformándose en una segunda madre, sin habérselo propuesto Sara.
Una historia que somete a crítica el modelo tradicional de familia judeo-cristiana acuñado por Occidente y que deja claro que, en cuestiones de sentimientos, nada hay escrito (en eso, cada uno de los personajes pensados por Rosett parecen tener una enciclopedia escrita a base de experiencias que podrían argumentar esta última idea)
LA VIDA EN CANADÁ es una interesante pieza tanto por su contenido como por el ritmo de la trama. El espectador seguro se sentirá identificado con muchas de las situaciones que allí suceden y elaborará una toma de posición respecto a los personajes y los conflictos que encarnan. Este corto forma parte de la programación del My French Film Festival 2024 en la Sección Cortometrajes y cuenta con varios elementos para conseguir algún reconocimiento una vez terminada la competencia oficial.
Calificación: ***
Ver el cortometraje subtitulado en español completo en este link
LA VIE AU CANADÁ (Fracia-2022) Dirección: Frederic Rosset, Elenco: Alisson Chassagne, Sebastien Chassagne, Sarah Zapata y Phillipe Rebbot. (26-Color)